Zoey van goey – Propeller versus wings

Podríamos decir que el estilo de Zoey van goey es un compedio de varias de las bandas escocesas, concretamente de Glasgow, que han creado escuela dentro de la cultura indie de los últimos tiempos, (nombres como The Delgados o Belle and Sebastian nos vienen automáticamente a la cabeza) pero sería decir poco. Lo interesante es darles un voto de confianza para ver como evolucionan en su propio sonido sin comparaciones, aunque con esos grandes referentes por bandera.

En este “Propeller versus wings”, su segundo disco de estudio no encontraremos nada nuevo respecto al primero, pero es que tampoco era esa la pretensión. La idea era volver a ofrecer un puñado de buenas canciones, ligeras, twee, naïve a veces, con pinceladas punk e incluso jazzy y reeinvindicarse a si mismos.

El álbum es como un apacible paseo entre melodías que pueden pasar de un tono a otro sin perder la compostura. Empezando por el tema que abre el disco, la traslúcida “Mountain On Fire” a la que sigue la guitarrera y festiva “The Cake And Eating It” con falsetes féminos incluídos. Poco después una armónica “Sackville Sun” donde destacan la linea del bajo y la voz de Kim Moore, sin duda una de las bazas de la banda. Le sigue la cabaretera “My aviator”, la intimista “Escape Maps” y la más cercana al primer trabajo “You Told the Drunks I Knew Karate” en el centro del disco. Y en la recta final la ágil “Little Islands”, “Extremeties” que nos transporta directamente a su ciudad de origen, la infantiloide (más en su letra que en su estructura musical) “Robot Tyrannosaur”, la potente “Another Day Another Disaster” y para cerrar la susurrante “Where It Lands” con la voz de Kim más cercana y candorosa si cabe.

Si te gusta este estilo o eres fan de la banda te encantará este “Propeller versus wings”, en caso contrario podrás encontrar muchos matices que harán de la escucha algo como mínimo interesante.