Mucha actitud y buenos estribillos, eso es lo que ofrece el dúo de Brooklyn Matt and Kim. Aunque a estas alturas los más escépticos aceptarían a regañadientes escuchar algo más sobre un tipo de movimiento que tuvo su auge más severo durante la década de los noventa, lo cierto es que bandas como Matt and Kim o los más gamberros Harry and The Potters, por citar algunos ejemplos, dejan constancia de que quizás no haya mucho que inventar pero si que descubrir en cuanto a new wave pop-punk se refiere.
Con un disco de debut que ya quisieran para si muchos, los americanos consiguen captar a ritmo de sintetizadores, guitarrazos, cajas de ritmos y estribillos frenéticos la atención del oyente que sin duda acogerá este trabajo de título homónimo con los brazos abiertos. Y es que Matt and Kim consiguen lo que no hace la mayoría, entretener y convertir sus canciones en un verdadero festival explosivo, rotundo y colorista, con letras que enganchan a la primera y que no pararás de tararear. Letras que forman parte de temas tan aplastantes como "It's a Fact" o "5k", de la que se ha extraído un primer video.
Incluso en momentos más pausados en canciones como "Dash After Dash" o "No More Long Years", no pueden parar de desprender una energía contagiosa, pese a ponerse más serios y melancólicos en estas composiciones con algunas lineas llorosas de teclados y sintetizadores acompañadas por la languidez de los acompañamientos vocales. De ese modo, el dúo demuestra no cerrarse las puertas a nada y lograr tanto instantes espontáneos y vitalistas como otros más serenos e intimistas.
Ruidismo, inmediatez y contundencia les ha llevado a ser comparados con bandas como We are Scientists o Mates Of State, aunque ellos pueden presumir de su propia personalidad y una fuerza que les hace sonar como ocho cuando en realidad son dos personas. De todos modos las comparaciones distan en una propuesta mucho más transgresora y divertida por parte del dúo.
En definitiva, un buen comienzo para una banda que surge de la escena siempre vanguardista y rompedora de su ciudad de origen, donde, aunque pueda parecer lo contrario, no siempre es fácil destacar, ellos de momento ya lo han conseguido, ahora solo es cuestión de mantenerlo.