Algo diferente a lo que normalmente se oye en cualquier bar en los días que corren es de agradecer, aunque se base y fundamente en décadas pasadas como la de los años sesenta y setenta.
Es por eso que no creo equivocarme al decir que Vandervelde comparte con Bowie algo más que el nombre. Parece que vuelve el glam y de esta corriente viene agarrado el nuevo trabajo de David: “Moonstation House Band”.
Este joven estadounidense nacido en Chicago presenta, un año después de su debut, un segundo disco grabado con total libertad en los estudios de Jay Bennet (ex Wilco), en el que él mismo toca todos los instrumentos. Gala de ello es el tema de despedida instrumental: “Moonlight Instrumental”.
La voz y la forma de entender la música es muy de Bowie, el Bowie de Hunky Dory o Ziggy Stardust. Reivindica el rock and roll de los 60’ y 70’, siendo muy evidente el glam rock en temas como "Nothin' No", "Jacket" o "Can't See your Face no More". En “Feet of a liar” su voz se pierde en algo más que el espacio, pero consigue llegar a nuestros oídos con la ayuda de un xilófono y tantos otros instrumentos que se conjugan a la perfección con sonidos inclusive de la naturaleza.
Son solo 8 temas, y lo más sorprendente sea, quizás, que un chaval de apenas 20 años cumplidos sea capaz de componer una instrumental tan delicada y actual como la que cierra el disco.
No desesperemos, quizás una nueva generación que aporte nuevas tendencias en el panorama musical es posible. Más allá del Indie, otra puerta se abre...
Glam-rock-pop 